Si repito tu nombre después de otra jornada y otra noche conmigo, si tu olor me recorre y entre pecho y guitarra se hace más el vacío. Si estas manos entre acorde y acorde acordándose van de tu pelo, no hace falta tanto cielo, si la luna de tu piel no está. Si entre verso y respiro se abre un azul profundo que va tiñendo el tiempo, si a contraluz te miro y se hace más agudo el filo de tu cuerpo. Si esta nota no alcanza tu tono y entonándote vuelo y respiro, no estoy solo, voy conmigo y la estela de este canto atrás. Puedo hablar de ti con mis amigos, mi canto, mi silencio, mi conmigo, puedo hallar tu rastro si lo quiero hoy y se perfectamente donde te dejé. Si estas manos entre acorde y acorde, acordándose van de tu pelo, no hace falta tanto cielo si la luna de tu piel no está. · . *